Salud y Medicina (Health and Medicine ES)
Remedios «caseros» para la salud: ¿ayuda la vitamina C contra el resfriado común?

Remedios «caseros» para la salud: ¿ayuda la vitamina C contra el resfriado común?

Resumen:

  • El resfriado común no es el nombre de una sola enfermedad, sino que se trata de un grupo de enfermedades leves de las vías respiratorias superiores como resultado de la infección por diferentes virus.
  • No hay prevención ni tratamiento para el resfriado común. Los medicamentos utilizados actualmente sólo tratan los síntomas de la enfermedad.
  • La vitamina C es una parte esencial de nuestra dieta. Sin embargo, no previene ni trata el resfriado común.

Las estaciones de otoño e invierno son conocidas por sus impresionantes paisajes. Por desgracia, también traen consigo el aumento de una de las enfermedades más frecuentes: el resfriado común. Sólo en EE.UU. es motivo de visita al médico para unos 25 millones de personas al año. Además, provoca 20 y 22 millones de días de ausencia al trabajo y a la escuela, respectivamente [1].

A pesar de su omnipresencia, existen muchos conceptos erróneos sobre el resfriado común, así como sobre su prevención y tratamiento. La mayoría de los niños han oído en algún momento de su vida que salir a la calle con el pelo mojado o sin gorro les hará coger un resfriado. Aunque podemos sentir frío, no nos hará coger un resfriado común. Con este artículo, iniciaremos una serie para explicar algunos de los remedios «caseros» para el resfriado común, así como para algunas otras enfermedades, y también presentaremos los resultados de experimentos científicos relevantes. La vitamina C (o ácido ascórbico) es uno de los remedios caseros preventivos más mencionados para el resfriado común [2, 3]. Ya mencionamos esta vitamina anteriormente (https://www.factsandreasons.com/es/la-dosis-hace-el-veneno-o-el-remedio-el-foco-en-las-vitaminas-y-los-minerales/ y https://www.factsandreasons.com/es/cuanta-quimica-contiene-mi-producto-natural/ ), y en este artículo explicaremos qué es el resfriado común y la eficacia de la vitamina C contra él.

“Homemade” health remedies: does Vitamin C help against the common cold?

Aunque el resfriado común se suele presentar como una sola enfermedad, en realidad es un grupo de enfermedades. Convencionalmente, se utiliza para denominar una enfermedad leve de las vías respiratorias superiores, que puede estar causada por varios tipos de virus. Los más comunes son los rinovirus (30-50%) y los coronavirus (10-15%). Tras las infecciones por rinovirus, los síntomas pueden aparecer en 10 horas y la enfermedad es autolimitada, lo que significa que los síntomas suelen durar hasta 10 días. Los síntomas más comunes son dolor de garganta, congestión nasal, estornudos y tos. La fiebre se observa principalmente en los niños, pero también puede aparecer en los adultos infectados [1].

Como hay cientos de virus que pueden causar el resfriado común, actualmente no existe una prevención eficaz en forma de vacuna [4]. Por la misma razón, tampoco existe una cura eficaz. Como la enfermedad es de todos modos autolimitada, todas las terapias disponibles se centran en aliviar los síntomas y acortar su duración [5]. En este contexto, es una creencia común que la vitamina C puede hacer ambas cosas: prevenir y curar el resfriado común.

La vitamina C es una parte esencial de nuestra dieta, ya que su deficiencia grave puede provocar una enfermedad potencialmente mortal llamada escorbuto [6]. Como el cuerpo humano no produce vitamina C, es importante incluirla en nuestra dieta. La dosis mínima recomendada actualmente de vitamina C en Estados Unidos y Canadá es de 75 y 90 mg al día para mujeres y hombres, respectivamente. El consumo de 5 verduras y frutas diferentes aporta entre 200 y 250 mg de vitamina C [7].

La idea de utilizar la vitamina C para prevenir y tratar el resfriado común fue ampliamente popularizada por el premio Nobel Linus Pauling. En su libro, aboga por tomar hasta 3.000 mg de vitamina C al día, basándose en una prueba realizada en escolares durante un campamento de esquí [8]. Desde entonces, se han realizado muchos ensayos para probar estas afirmaciones, con diversos resultados. Los resultados de los ensayos se reunieron y analizaron para extraer las conclusiones. En consecuencia, se demostró que la administración diaria de suplementos de vitamina C entre 200 mg y 3.000 mg no tuvo ningún efecto sobre la cantidad de incidentes de resfriado común de los participantes en comparación con el grupo de placebo. Sin embargo, se demostró que la duración disminuyó en un 8% y un 14% para los adultos y los niños, respectivamente. Esto significa que, considerando 10 días como la duración media de los síntomas, para los adultos sería de 9,2 días y para los niños – 8,6 días. Sin embargo, estos resultados no se confirmaron en todos los estudios. Además, la gravedad no se vio influida. En el caso del uso de la vitamina C como fármaco terapéutico, los pacientes han sido tratados diariamente con hasta 8000 mg de vitamina C después de que los síntomas ya hayan aparecido. Sin embargo, no hubo diferencias en la duración y la gravedad entre los grupos controlados y los de placebo [9-11].

En conclusión, la vitamina C es una parte esencial de nuestra dieta diaria. Sin embargo, la suplementación con vitamina C no previene las infecciones del resfriado común. Además, no es eficaz contra la enfermedad.

Referencias:

  1. T. Heikkinen and A. Järvinen, “The common cold,” The Lancet, vol. 361, no. 9351, pp. 51–59, Jan. 2003, doi: 10.1016/S0140-6736(03)12162-9.
  2. E. Sulewska, “Jak się pozbyć przeziębienia domowymi sposobami? 9 prostych porad,” uPacjenta.pl, Feb. 11, 2021.
  3. S. Calabro, “Top 10 Home Remedies for the Common Cold,” everydayhealth.com, Nov. 02, 2017.
  4. D. Simancas-Racines, J. V. Franco, C. v Guerra, M. L. Felix, R. Hidalgo, and M. J. Martinez-Zapata, “Vaccines for the common cold,” Cochrane Database of Systematic Reviews, vol. 2017, no. 5, May 2017, doi: 10.1002/14651858.CD002190.pub5.
  5. K. C. DeGeorge, D. J. Ring, and S. N. Dalrymple, “Treatment of the Common Cold.,” American family physician, vol. 100, no. 5, pp. 281–289, 2019.
  6. J. Lykkesfeldt and H. E. Poulsen, “Is vitamin C supplementation beneficial? Lessons learned from randomised controlled trials,” British Journal of Nutrition, vol. 103, no. 9, pp. 1251–1259, May 2010, doi: 10.1017/S0007114509993229.
  7. S. Padayatty and M. Levine, “Vitamin C: the known and the unknown and Goldilocks,” Oral Diseases, vol. 22, no. 6, pp. 463–493, Sep. 2016, doi: 10.1111/odi.12446.
  8. L. Pauling, Vitamin C and Common Cold, vol. 216. 1971. doi: 10.1001/jama.1971.03180280086025.
  9. H. Hemilä and E. Chalker, “Vitamin C for preventing and treating the common cold,” Cochrane Database of Systematic Reviews, vol. 2013, no. 5, Jan. 2013, doi: 10.1002/14651858.CD000980.pub4.
  10. K. A. Heimer, A. M. Hart, L. G. Martin, and S. Rubio-Wallace, “Examining the evidence for the use of vitamin C in the prophylaxis and treatment of the common cold,” Journal of the American Academy of Nurse Practitioners, vol. 21, no. 5, pp. 295–300, May 2009, doi: 10.1111/j.1745-7599.2009.00409.x.
  11. R. M. Douglas and H. Hemilä, “Vitamin C for Preventing and Treating the Common Cold,” PLoS Medicine, vol. 2, no. 6, p. e168, Jun. 2005, doi: 10.1371/journal.pmed.0020168.